Blog Uribe Schwarzkopf

'Juana de Nadie' es libertad

Escrito por Uribe Schwarzkopf | 02 mayo 2024

Johanna Machado -arquitecta- es la diseñadora de ‘Juana de Nadie’, a ella la creación a través de la moda le viene en la sangre y lo hace desde muy pequeña, “yo cosía con mi abuelita, siempre me gustó diseñar ropa para mis muñecas, para mis amigas, para sus hijas y ahora lo hago para todas.” Así fue como Mariana Lanusse -administración y marketing- y Rosa Elena Gaibor -administración-, se asociaron con Johanna. Su marca ya estaba creada, surge en el 2020 y se llama así porque es su nombre en español -Juana- y ‘de Nadie’ “porque las mujeres no necesitamos a alguien a nuestro lado para sobresalir, ni somos de nadie, sólo de nosotras mismas, y todo podemos hacerlo solas." Ella nos cuenta que años atrás, su ex esposo la abandonó y pudo salir adelante por ella misma con dos hijos pequeños.

Mariana y Rosa Elena decidieron hacer un quiebre en su vida y emprender en algo propio, les encantaba los vestidos de Johanna y además querían trabajar en un negocio que entregue alegría a las personas, y que ayude de verdad a mujeres, y es que ‘Juana de Nadie’ es un negocio feliz, que repercute directamente en el bienestar y calidad de vida de quienes creen en ellas y se dejan deslumbrar con el resultado. ‘Juana de Nadie’ refleja el concepto con el que trabajan estas tres socias, que comprendieron la importancia de crear un emprendimiento, donde a través de la ropa personalizada, con diseño, estilo y conciencia, se logra una onda expansiva potente, que se transforma en felicidad y empoderamiento real con una misma. “Nuestro compromiso desde el primer día es claro, trabajamos con mujeres -costureras- generando mano de obra local y apoyando el oficio, y la meta es hacer que quien llega a la tienda, salga sintiéndose una reina. Y lo logramos, porque no hay mayor satisfacción para nosotras que ver los rostros de las chicas pequeñas y grandes, reflejando lo que verdaderamente son, ellas mismas”, dice Mariana, orgullosa del trabajo que han logrado en equipo, potencializando las fortalezas de cada una que han sabido responder a la presión del tiempo, pues en pocos meses la tienda es una realidad y con una receptividad considerable.

 Rosa Elena, Jhoanna y Mariana.

Hay dos tipos de diseños claros en ‘Juana de Nadie’, “uno floral para el día y otro más para la noche. Hay clientes para todo, por ejemplo, las chicas entre 15 a 30 años, aman los diseños de la noche, ha sido un furor, porque son modernos con colores súper block, es lo que está de moda. En cambio los diseños para la mañana, son súper florales y los usan en el día. Los desfiles que hemos hecho han tenido gran acogida”, dice Johanna. Comenzaron con un target fijo de adolescentes entre 15 a 25 años, pero sus mamás también querían un vestido y así se ampliaron con el fin de hacer felices a todas, “las chicas suelen llevarse vestidos ya hechos, las más grandes se mandan a hacer. Nosotras les asesoramos en base a la idea que tienen y lo que mejor les quede”, explica Mariana.

Un desafío importante las recibe a diario, ellas lo saben, porque se enfrentan a almacenes que venden en serie y a precios más bajos, luego de un estudio de mercado en ‘Juana de Nadie’ saben que las boutiques que ofrecen el mismo tipo de servicio que ellas, están dentro de su mismo rango. Y con el paso del tiempo se han dado cuenta que éste es un negocio que vale la pena, “es súper lindo, porque va más allá del sueño de Johanna y de nuestras ganas de emprender, es pura sororidad entre mujeres, es divertido porque es un negocio de mujeres para mujeres, donde ya somos una tribu que se siente parte de ‘Juana de Nadie’. Estamos construyendo poco a poco, es una tienda nueva y damos pasos firmes y sostenidos, eso es un gran logro. Esto no se trata de sólo vender un vestido, acá se recibe a chicas y las acompañamos hasta que ese vestido le quede hermoso. Que salgan de aquí sintiéndose bien y empoderadas”, dice Mariana.

Envolverse en esta tienda es recargarse de buena energía, de belleza, de abrazos que rescatan e impulsan lo mejor de cada una, se siente la inversión, en tiempo y dinero, y lo vale. Si bien ‘Juana de Nadie’ maneja una línea y estilo determinado, es vital la personalidad de cada clienta, porque crean su segunda piel. Ellas las miran de verdad, las conocen y se adaptan a sus gustos, “esa sensibilidad de poder entender al cliente es súper importante, porque estamos aprendiendo. Nuestro nicho de adolescentes, por ejemplo, que suelen estar conflictuadas sin saber exactamente lo que quieren y además necesitan la aprobación de sus papás, nos exige una constante actualización, a mi me encanta”, dice Rosa Elena, quien sabe perfectamente lo que es la vida de una adolescente -madre de una- y conoce sus necesidades y urgencias, “de hecho así nació esta idea, Mariana y yo pasábamos por lo mismo. Poder acudir a alguien como Johanna que te pueda asesorar desde la tela hasta el modelo y la confección, y a la brevedad del caso. Todo hecho a tu medida y con un margen de precio asequible.”

Tres mujeres que durante estos meses han aprendido a trabajar en equipo, a cubrirse y descubrirse, a revelar sus fortalezas, y sobre todo, a apoyarse mutuamente entre la producción, la renovación, el feedback, la administración, y los números para salir adelante con pasos firmes en un negocio que va más allá de la moda, aquí se habla de mujeres, de seres humanos que aprenden a proyectar lo mejor de cada una sin temor. Su trabajo incluso sostiene, como unas psicólogas de la moda que atienden las necesidades e inseguridades típicas de la adolescencia, las que marcan y definen para siempre. “Todo fue tan rápido desde el inicio porque teníamos quince días para montar un desfile, ‘Contrastes’, nos interesaba estar ahí y eso nos puso a prueba, ‘Juana de Nadie’ esa noche brilló. Creo que eso es lo que nos destaca, la buena actitud y la manera de enfrentar lo que nos toque hacer, remando todas hacia el mismo objetivo”, enfatiza Rosa Elena.

El sello está ahí, ahora es fácil distinguir un diseño de esta tienda sobre otras, porque cada pieza refleja la esencia de cada mujer, “nuestros prints y colores nos permiten personalizar los diseño. Nuestra nueva colección está en camino, así como los vestidos de noche y de graduación, nos encanta ser parte de esos momentos que marcan una etapa relevante”, explica su diseñadora, quien entiende la importancia de realizar más desfiles cortos en la propia tienda para invitar a pequeños grupos y complementarlo con charlas de empoderamiento o maquillaje o temas que requieran ser hablados, siempre rodeados de arte, “queremos abrir un espacio donde puedan expresarse de cualquier manera”, dice Mariana.

La imaginación y calidad no tienen límites y próximamente nos encontraremos con colecciones espectaculares, diseños creados en prints propios, inspirados en el país, “porque para nosotras el Ecuador, su flora y fauna, sus paisajes y sus texturas, son un referente valioso”, dice Johanna, quien explora y sostiene con prolijidad la esencia de ‘Juana de Nadie’.

 

Instagram: juanadenadie_

Dirección: Av. Pampite N1-101, Cumbayá.

 

‘Juana de Nadie’ es ser tu misma, es entrar a la tienda y sentir el ambiente de sororidad femenina, resaltar la belleza, jugar con la personalidad de cada una y poder brillar desde adentro, porque esa sinergia, transforma, porque la ropa produce sensaciones y tiene energía.