Los últimos meses del año son los más fríos. Las bajas temperaturas ambientales y, con ello, la humedad que trae las lluvias son factores que alteran la sensación térmica dentro de un departamento. Para estos casos, existen recomendaciones y soluciones.
Más allá de la comodidad, el hecho de no hacer algo para mejorar las condiciones térmicas puede traer afectaciones a la salud debido a la proliferación de microorganismos.
El primer paso es observar las paredes del departamento para identificar problemas de humedad que afectan el confort. De encontrar alguno es fundamental que sea resuelto por un experto. Bajo ninguna circunstancia se lo debe tapar con pintura u otro material. Al llegar a la raíz del problema evitarás que la humedad tome más espacios.
En los casos en los que la humedad no provenga de ningún daño estructural, puedes optar por usar un dispositivo deshumidificador que ayuda a disminuir esta condición y mejora la sensación térmica del departamento.
El frío puede permear por las paredes o los techos
En principio será necesario que un experto verifique las estructuras y, cuando el caso amerite, con la ayuda de mano de obra calificada se puede optar por recubrir las estructuras internas con materiales aislantes que impidan que el frío exterior invada la casa y que el calor interior se fugue.
Para estos casos, se recomienda usar aislantes de materiales como gypsum, lana de vidrio u otra fibra natural con buena resistencia térmica y apta para dicha función.
Las ventanas son otras estructuras clave porque por ahí también se fuga el calor y permea el frío.
Cuando las ventanas ya tienen algunos años de más, quizá estas ya no sean tan herméticas como al principio y eso es algo que se debe atender sí o sí.
Lo primero que se debe verificar es si las uniones o hendiduras ubicadas en los bordes están en buen estado. De no ser así, estas se deben sellar con materiales como silicona o con burletes que son tiras de caucho u otros materiales propios para juntas y rendijas.
Es recomendable cambiar los vidrios que tengan fisuras o estén trizados pues, además de ser peligroso, permiten el paso de humedad y frío con mayor facilidad. En algunos casos, hay que invertir un poco más de presupuesto para cambiar las estructuras en su totalidad, colocar vidrios más gruesos o, mejor aún, poner doble cristal.
Las puertas también tienden a ser intervenidas cuando de evitar el frío se trata. Muchas veces los materiales de los que son hechas no favorecen al confort térmico que queremos tener en el departamento. Estas pueden ser reforzadas con materiales aislantes como el poliuretano o espumas aislantes.
Para las bases de las puertas también se puede instalar burletes que evitan que se pierda calor interior.
En los casos en los que es necesario cambiar estas estructuras, se recomienda usar puertas con hojas de acero, rellenas de espuma y recubiertas de aglomerado que garantizan que el frío se quede fuera del departamento.
Hay opciones complementarias y súper prácticas
Si eres de los que usa calefactores eléctricos u otro equipo calentador, los expertos recomiendan siempre ubicarlos en las bases de las ventanas pues desde ahí es que se puede controlar el aire frío que, usualmente, entra por la ventana.
Otra recomendación fundamental es evitar secar la ropa en el interior del departamento ya que eso aumentará la humedad en el hogar.
Bajo ningún concepto cubras los espacios por donde ingresa el sol, en la medida de lo posible, permite que durante el día entre el calor por todos los espacios disponibles.
A pesar de que haga frío, siempre debes ventilar los espacios que habitas. Aprovecha al medio día u horas con mejor temperatura para abrir las ventanas por un par de horas. Esto evitará que gane la humedad al interior del hogar.
Por último, y muy importante. Debes saber que las cortinas son uno de los mejores aislantes que tiene un hogar y mientras más gruesas mejor. Cuando el frío está ganando la batalla es preferible evitar las cortinas fabricadas de tela como terciopelo o algodón.
Existen cortinas térmicas fabricadas con telas gruesas y materiales aislantes que evitan que se pierda el calor interno. Usualmente sus diseños tienen pliegues que atrapan el frío convirtiéndose en una excelente barrera térmica.