Se percibe al tiempo cada vez más escaso, cada vez más fugaz, cada vez más drástico. Las tendencias tienen un principio y un fin, y estar inmerso en las mismas para transmitir visión e innovación en estas disciplinas se convierte en una obligación. Es así que profesionales con las credenciales para serlo, están ya sobre la jugada y nos han dado señales de que el 2024 está a la vuelta de la esquina y no podemos quedarnos atrás.
Mira lo que se viene y adelántate un paso, te tomará sólo unos minutos y tendrás una visión de lo que nos está por rodear dentro de muy poco.
"Inspiring Living For Tomorrow. Lifestyle Trends 2024 by Neolith" se ha puesto como meta analizar de manera profunda lo que pasa en el mundo, los cambios en la sociedad y las nuevas necesidades de los seres humanos con el entorno. Es así que se ha llegado a conclusiones claras donde la imaginación juega un rol trascendental para la transformación, desde luego apalancada por la innovación que permite crear lugares donde las personas quieran vivir, sentir y disfrutar.
La arquitectura y el interiorismo cambian para transformar espacios más habitables, sensoriales y cercanos a los orígenes, un cambio donde todo lo que nos rodea está conectado.
Urbanismo de Espíritu Autónomo
Este urbanismo consiste en facilitar un estilo de vida más ágil, autónomo y sostenible a los habitantes de cada ciudad. Serán espacios no estáticos y de múltiples usos, tanto en el hogar como en oficinas, espacios comerciales o de uso público.
En las grandes ciudades, donde el espacio es cada vez más reducido y valioso, nace el microliving. Una tendencia que empezó en Estados Unidos y que refleja la idea de que la funcionalidad de una vivienda va más allá de sus metros cuadrados. Este estilo de vida prioriza su tiempo, la conectividad y una ubicación céntrica con la menor cantidad de desplazamientos -o más cortos-.
Greentecture
El microliving se completa -por lo general- con un enfoque “verde” y sostenible del urbanismo y de un tipo de arquitectura: la Greentecture, ésta se basa en criterios bioclimáticos y de autosuficiencia. Claro ejemplo son las casas pasivas, que buscan el equilibrio entre el confort interior y un consumo de energía muy bajo. El interiorismo lo ha comprendido y reflejada esta tendencia a través del uso de colores vivos y alegres: amarillo flor de Bach, rojo quemado y amaranto, verde eucalipto, azul cobalto, rosa azalea y el violeta.
Autocuidado en interiores
Algo vital será el bienestar y el cuidado personal como claves en el diseño de espacios, tomando en cuenta conceptos físicos, psicológicos, emocionales, sociales, profesionales, ambientales, espirituales y financieros. El autocuidado, la relajación o la contemplación deben tener muy presente todos a la hora de diseñar desde aeropuertos, hasta bancos, hospitales y otros espacios públicos.
Diseños con un enfoque holístico o misión regenerativa comienzan a tenerse en cuenta a la hora de crear espacios de salud como clínicas y hospitales, incluso farmacias, y están llegando a los proyectos residenciales. El teletrabajo ha abierto nuestras casas y el diseño y el interiorismo buscarán convertir el hogar en un lugar seguro, un escenario de bienestar multisensorial.
Respeto por la naturaleza
La naturaleza y el equilibrio, conceptos potentes que generan conciencia de respeto al entorno. Estamos en la era de la investigación, de la innovación y de llevar estos resultados al uso comercial, para que todos podamos contribuir y acceder a avances, siempre respetuosos con la naturaleza. Los consumidores ahora están dispuestos a invertir, cada vez más, en productos y marcas sostenibles con consumo más responsable que valoren lo que se tiene sin buscar sustituirlo rápidamente.
En los últimos meses del año ya se perfilan los estilos que predominarán el diseño, la arquitectura y el interiorismo en el 2024, la era del respeto, de la generación de residuos cero y del upcycling -transformar un desecho en un producto de mayor calidad y valor ecológico-.
Fuente: revistainteriores.es